Ahorrar agua, tiempo y dinero con la lavadora es más fácil de lo que crees.  Aquí tienes algunos consejos:

Cuándo lavar.  ¿Sabías que muchas personas lavan y secan demasiado su ropa?  Antes de lavar la siguiente carga de ropa, párate un minuto y piensa si la ropa está realmente sucia.  Si solo has usado tu ropa una vez, puede que no sea necesario lavarla. Por supuesto, siempre hay que lavar la ropa interior y del gimnasio después de usarla.  Pero en el caso de camisas, sweaters y pantalones, sobre todo los jeans, puedes usarlos unas cuantas veces antes de lavarlos, a menos que hayas sudado o que estén manchados.  En pocas palabras: si no superan la prueba del olfato, es necesario lavarlos.  Consulta la lista de recomendaciones de Consumer Reports sobre la frecuencia de lavado de ciertas prendas.

Llénala (pero no te pases).  Nada es más satisfactorio que una cesta de ropa vacía, pero resiste la tentación de lavar una pequeña cantidad de ropa solo para quitártela de encima.  Cada carga de ropa usa agua y energía, y se trata de hacer que esto cuente.  Una de las maneras más fáciles de ahorrar agua y energía es asegurarse de lavar cargas completas.  

Sin embargo, si la lavadora está demasiado llena, la ropa no se lavará correctamente, así que no la sobrecargues.  Asegúrate de dejar espacio suficiente para que el agua y el detergente hagan su trabajo, así que llena la lavadora de 2/3 a 3/4 de su capacidad, no más.  Además, carga la ropa sin apretarla.  No lo pongas todo junto solo para conseguir una carga completa.  La ropa muy sucia debe lavarse por separado, así como los colores y ciertos tipos de tejido.

Mejor en frío.  Hasta un 75% de la energía utilizada para lavar la ropa se destina a calentar el agua.  Lavar con agua fría ahorra energía y puede reducir tu factura.  Es más, lavar la ropa con agua fría puede hacer que dure más tiempo.  El agua caliente hace que la ropa se decolore más rápido y también hace que encoja.

¿Te preocupa que la ropa no quede bien limpia con agua fría?  Tranquilo. La mayoría de los detergentes se han desarrollado para funcionar bien con agua fría.  Si no estás seguro, consulta la etiqueta del fabricante.  Y si tienes una carga ocasional de calcetines, ropa de deporte o algo que esté más sucio, haz un prelavado con agua tibia y usa agua fría para el enjuague.  De este modo, reducirás significativamente el consumo de energía y ahorrarás dinero.

Prográmala bien.  Usar el ajuste correcto en la lavadora te puede ayudar a ahorrar agua y energía.  Si de verdad necesitas lavar esas cuatro prendas, utiliza el ajuste de carga reducida o baja el ajuste del nivel de agua.  Si la ropa no está muy sucia, evita usar el ciclo de prelavado.  Comprueba las instrucciones y asegúrate de añadir la cantidad adecuada de detergente.  Mucha gente pone demasiado, lo que aumenta el tiempo de enjuague y puede dar lugar a problemas en la lavadora que requieran reparación.  Comprueba las instrucciones del detergente para tu tipo de lavadora y síguelas.  Además, si no usas demasiado detergente, puedes omitir la opción de enjuague adicional.  Por último, asegúrate de que la lavadora retire la mayor cantidad de agua posible antes de secar.  El uso del ciclo de alto centrifugado reducirá el tiempo posterior de secadora y ahorrará energía y dinero.

Encárgate a mano de las manchas.  Si hay manchas específicas en la ropa, es una buena idea tratarlas con un quitamanchas apropiado o con un poco de detergente antes de meter la prenda en la lavadora.  En algunos casos, puede que ni siquiera sea necesario realizar un lavado a máquina.  El lavado a mano puede ser más que suficiente para una mancha pequeña, lo que te permite seguir usando la prenda antes de lavarla.

Lava con cabeza.  Comparte lo que has aprendido con todas las personas de la casa y coloca una nota cerca de la lavadora para recordarles a todos estos consejos.  Comprométete a seguir estos consejos siempre que puedas y marca esta acción como realizada.

Crédito extra: Cambia tu lavadora por una más eficiente.  Renueva tu lavadora a un modelo más eficiente y ahorra significativamente en agua, energía y dinero, sobre todo si la tuya es de antes de 2003.  Comprueba la acción Renueva la lavadora para obtener más información.