Comparte automóvil
Compartir el automóvil ahorra dinero, prolonga la vida útil de tu automóvil y reduce tu impacto. También es una oportunidad para relajarte o tener una buena conversación. Si tienes un horario regular y un trayecto de media o larga distancia, piensa en compartir coche.
Tu impacto
Consejos y pasos de la acción
Introducción
Compartir automóvil es una manera fácil de reducir el número de viajes en los que conduces, ahorrar tiempo y dinero, y reducir tu impacto. Dado que el transporte es generalmente el principal impacto para la mayoría de la gente, esta es una gran oportunidad para marcar la diferencia. Estos son algunos de sus muchos beneficios:
- Compartir automóvil para ir al trabajo puede ayudar a reducir el tiempo de desplazamiento porque se pueden utilizar los carriles de alta ocupación y, además, te dará tiempo para relacionarte con otras personas, relajarte o ponerte al día con el correo electrónico.
- Para los padres ocupados, compartir el automóvil es una excelente manera de llevar a los niños al entrenamiento de fútbol, a las sesiones de estudio y a otras actividades extraescolares a las que no se puede ir caminando.
- Compartir automóvil puede ahorrarte dinero en términos de combustible y mantenimiento del automóvil.
- Y por supuesto, al compartir el automóvil, ahorras gasolina y reduces las emisiones.
Hay algunas cosas que hacen que compartir automóvil sea más fácil: un horario regular al destino que otros también comparten, como un horario fijo de trabajo, de entrenamiento o un horario escolar. Piensa en tu horario semanal regular y mira si hay actividades para las que podrías organizar o unirte a un viaje compartido. Prueba un día a ver qué tal te va.
1Encuentra a alguien con quien viajar
Hay muchas maneras de encontrar un compañero o un grupo de automóvil compartido. Si conoces a alguien que viva cerca de ti que vaya al mismo lugar, pregúntale si le gustaría que viajasen juntos. Si vas a compartir el automóvil al trabajo, consulta con tu departamento de recursos humanos para ver si tu empresa tiene un programa de viajes compartidos. Si estás en una lista de correo electrónico asociada con tu destino (trabajo, escuela, iglesia), envía un correo electrónico a la lista para ver si alguien quiere compartir el automóvil. Podrías hacer nuevos amigos.
Hay algunas aplicaciones que facilitan la organización de viajes compartidos, como Waze Carpool, Scoop para compartir el viaje con compañeros de trabajo y Carpool-Kids para viajes con niños. También puedes consultar la sección de recursos a continuación para ver si hay recursos en tu zona.
2Coordina el horario y la ubicación de recogida
Una vez que encuentres a alguien con quien compartir el automóvil, organicen los detalles. Decidan quién conducirá, en qué días y dónde se reunirán. Piensa si te sentirás cómodo con que los otros conductores sepan dónde vives o si prefieres reunirte en un lugar neutral. Algunas áreas cuentan con una zona de estacionamiento y parada que lo hace más fácil. Otra opción es quedar en una esquina cerca de casa.
Establezcan un horario para cada recogida. Cuando hay varias personas involucradas, esto puede complicarse, así que asegúrate de que a todos les queda claro. Finalmente, decidan cómo dividir el costo. Pueden alternar la conducción o los pasajeros pueden contribuir a la gasolina. No todos los automóviles consumen la misma cantidad de gasolina, así que decidan juntos qué es justo para todos.
3Establezcan unas normas, tengan un plan B y ¡listo!
Definan unas normas básicas. Hay cosas que querrán discutir de antemano para evitar molestias o desacuerdos en el futuro.
- ¿Cuánto tiempo se va a esperar a alguien que llega tarde?
- ¿Se puede comer o beber en el automóvil? ¿Alguien quiere parar a tomar un café?
- ¿A alguien le molesta la música? ¿Qué tipo de música es agradable para todos?
- ¿Está permitido fumar? ¿A alguien le molesta el perfume o la colonia?
- ¿Se puede hablar por teléfono?
Si llevas a niños del vecindario, asegúrate de que conozcan las normas de comportamiento en el automóvil y qué ocurre si no las respetan. Algunos ejemplos:
- Si alguien grita, detengo el automóvil
- Si alguien golpea, patea o muerde a alguien, detengo el automóvil y la consecuencia es...
- No se insulta
- No se come en el automóvil
Ten un plan B. Incluso los mejores planes fracasan a veces. La gente se enferma. Son cosas que pasan. Dependen unos de otros, así que asegúrense de tener un plan de contingencia.
¡Relájate y disfruta del paseo! Lee un libro, ponte al día con los correos electrónicos o disfruta de una buena conversación. Relájate y disfruta del viaje, ¡estás marcando la diferencia!